- Precalienta el horno a 190ºC calor arriba y abajo.
- Bate la mantequilla (que esté a temperatura ambiente) con el azúcar durante 3-5 minutos. Tiene que aumentar el tamaño y tomar un color blanqueado.
- Añade dos huevos y bate durante 2 minutos más.
- Incorpora la almendra molida, la harina, la levadura el polvo, la sal y el cardamomo.
- Mezcla bien y coloca la masa en un molde bien untado con mantequilla. Extiende con una cuchara para que quede uniforme.
- Parte 3 alberjes por la mitad, quitándoles el hueso y colócalos sobre la tarta.
- Espolvorea azúcar po encima y hornea durante 40 minutos. Deja enfriar 10 minutos antes de desmoldarla.
Los alberjes son como llamamos a los albaricoques en Aragón. Fuera de aquí también podéis preparar esta tarta y llamarla de almendras y albaricoques. Da un poco igual. Lo que importa es lo fácil que es de preparar y lo bien que queda servida con helado de vainilla bueno. Se puede hacer con cualquier fruta de temporada (en verano también con higos, melocotones, moras, frambuesas, peras, nectarinas) y es la merienda que va desapareciendo de la bandeja conforme pasa la tarde, y nadie sabe cómo. Charlotte de Adiosamores, para acompañar musicalmente.